Eliminación de líquidos y remineralización
La Cola de Caballo presenta un efecto diurético, y por su alto contenido en sales minerales y Sílice, un efecto remineralizante.
Tradicionalmente se recomienda para aumentar la diuresis y para la recuperación de fracturas óseas y ligamentosas, así como para fortalecer pelo y uñas.
La Cola de Caballo es una especie muy común en centro Europa. Prefiere los suelos húmedos, incluso marismas, y se caracteriza por tener dos tipos de tallos: los fértiles que son no clorofílicos y aparecen en primavera y los estériles que se desarrollan más tarde. Los tallos fértiles desarrollan al final una espiga esporangífera. Tan solo los tallos estériles son los empleados popularmente. Son tallos huecos de hasta casi 1 metro de altura, están articulados en los nudos, sobre los que se insertan las hojas. Estas forman una vaina alrededor del tallo y son verticiladas de pequeño tamaño. Si se corta el tallo, se observa que tanto las paredes de la epidermis como que el tejido colenquimatoso están silificados.
Químicamente la cola de caballo es muy rica en sales minerales, especialmente en Sílicio. También contiene numerosos Flavonoides, que varían en función del quimiotipo, aunque se mantiene constante el Isoquercitrol.
Ingredientes: Extracto seco Biológico de Cola de Caballo* (Equisetum arvense), Agentes de carga: Maltodextrina*, Dióxido de Silicio y Talco. Cubierta: Celulosa.
* Procedente de la Agricultura Ecológica.
Modo de empleo: Tomar 1 o 2 cápsulas al día antes de acostarse con un vaso de agua o infusión.
Presentación: Envase con 30 cápsulas.
Características | Producto Bio |
Esmeralda Bustos –
Por ahora bien pero poco